págª mantenida por Lorenzo Peña
Afganistán: Una página de ESPAÑA ROJA

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[Van ii) msjes]
12oct01

i) INFORMACIÓN VITAL SOBRE LOS TALIBANES PUEDE QUEDAR EN MANOS DE SU MÁS IMPORTANTE PATROCINADOR: LOS SERVICIOS DE INTELIGENCIA PAKISTANÍES.

Los servicios de inteligencia pakistaníes (ISI) siguen siendo la clave para proveer información segura a la alianza encabezada por Estados Unidos en su guerra contra Osama Bin Laden y sus defensores talibanes en Afghanistan. Conocidos como “la armada secreta” y “el gobierno invisible”, su sombrío pasado esta relacionado con asesinatos políticos y el contrabando de narcóticos así como de componentes nucleares y misilísticos.

El ISI asimismo respalda a los talibanes, y al mismo tiempo mantiene la insurgencia comenzada hace 12 años en el norte de la India por la disputada provincia de Cachemira, apoyando a grupos militantes musulmanes y manteniendo la política de “muerte por mil cortes” que muy efectivamente llevó a los sovieticos fuera de Afghanistan, llevandolos a su deceso politico.

Las acciones que se llevan a cabo en los desconocidos cuarteles del ISI, enclavados detrás de unas altas paredes en la avenida Khayban-e-Suharwady, en el centro de la capital pakistaní Islamabad, y sus adyacentes oficinas en la cercana ciudad de Rawalpindi, han dominado las políticas interiores, nucleares y exteriores de Pakistán, especialmente aquellas relacionadas con Afghanistan, durante las ultimas dos décadas.

El jefe del ISI, el Teniente General Mahmood Ahmed, quien estaba de visita en Washington cuando New York y el pentágono fueron atacados, acepta compartir con la Agencia Central de Inteligencia norteamericana (CIA) y otras agencias de Defensa, información sobre los talibanes necesitada desesperadamente.

La CIA tiene establecidas muy buenas relaciones con el ISI, habiendoles dado entrenamiento en la década de los 80 a los mujahidden afganos (guerreros santos musulmanes) y a otros fundamentalistas islamicos de Pakistán así como voluntarios árabes, proveyendoles con armas y soporte logístico para terminar con la ocupación sovietica de Kabul.

El ISI es en este momento los ojos y los oídos de la acción encubierta de la alianza encabezada por los Estados Unidos para capturar a Bin Laden de los talibanes, debido a que cientos de sus agentes y bienes continúan operando a través de Afghanistan.

Su influencia con los talibanes puede ser juzgada por la inclusión del General Ahmed en la delegación militar y diplomatica pakistaní en la capital de la milicia religiosa, Kandhar, al sur de Afghanistan, en un intento de disminuir la inminente crisis militar.

La delegación pakistaní presentó una petición frente a los talibanes, aunque en vano, para que entregasen a Bin Laden a los Estados Unidos, que lo tiene a este último como el responsable de los ataques del pasado 11 de Septiembre al World Trade Center y a Washington, en el que se teme más de 7000 personas han muerto.

Fundado poco después de la independencia en 1948, para juntar información en la región de Cachemira, controlada por Pakistan, y en Pakistan del Este (más tarde Bangladesh), el ISI fue moldeado teniendo en cuenta a la Savak, la agencia de seguridad iraniana, y como la Savak fue entrenada también por la CIA y el SDECE, los servicios externos de inteligencia franceses. La ocupación soviética de 1979 en afghanistan, llevó a la CIA, herida ya por el retiro de Vietnam, a mejorar las capacidades de las acciones encubiertas del ISI impulsando los grupos de resistencia mujahidden contra los soviéticos en Afghanistan.

El ex-presidente pakistaní, General Mahammad Zia-ul-Haq, que fue asesinado junto con el jefe del ISI, amplió la agencia relacionandola con la recolección de información religiosa y política de grupos de oposición a su régimen militar.

A través de Gen Zia, la división política interna del ISI, asesinó a Shah Nawaz Bhutto, uno de los dos hermanos de la Primer Ministro pakistaní Banazir Bhutto, envenenandolo en la riviera francesa, en 1985. El propósito fue intimidar a Bhutto para que no volviera a Pakistán para dirigir el movimiento multipartidista para la restauración de la democracia, pero Banazir Bhutto no acepto el dejarse acobardar y regreso a Pakistán, solo para ser derrocada por el ISI poco después de convertirse en Primer Ministro en 1988.

Se cree también que el ISI ha formado recientemente una fuerza secreta de tareas dirigida por el General Ahmed, comprometiendo al Ministro del Interior, el Teniente General retirado Moinuddin Haider y al Jefe del Ejército, el General Muzaffar Usmani, para destruir los mayores partidos políticos y el movimiento separatista Mohajir Quami (MQM), en la sureña provincia de Sindh.

Esta fuerza secreta ha repetidas veces alentado no solo organizaciones islamicas religiosas, como el Jamaat-e-Islami (JeI) y el Jamiat-ul-Ulema Islam (JuI), sino también organizaciones sectarias, como la fundamentalista Sipah Sahaba y la Lashkar-e-Jhangvi (relacionadas de cerca a los talibanes y Bin Laden), para extender sus acciones hasta Sindh. Se cree que estas organizaciones fueron más allá de lo deseado por el ISI, y comenzaron a recrutar jovenes desempleados rurales sindhis para los talibanes, afirmando una amenaza a la cooperación con Washington del General Musharraf, fomentando la guerra santa (Jihad) contra occidente.

Luego del vergonzoso retriro sovietico de Kabul en 1989, el ISI se propuso llevar a cabo su propósito de extender la profundidad estratégica de Pakistán creando un califato islámico, controlando Afghanistán y las Repúblicas Asiáticas Centrales, manteniendo a un poco conocido movimento estudiantil en Kandhar que emergería como los talibanes. El ISI utilizó fondos del Gobierno Federal de la Primer Ministro Benazir Bhutto y de ayudas islamicas en el exterior, para enrolar graduados de miles de madrassahs (seminarios musulmanes) a través de todo Pakistán, para reforzar a los talibanes (estudiantes islámicos), que eran dirigidos por el recluído Mullah Muhammad Omar.

A partir de entonces, por medio de una dura combinación entre el soborno de la coalición tribal dirigente de Afghanistán (que fue dividida con rivalidades internas), tácticas de guerrilla y sostén militar, el ISI instaló al régimen Taliban en Kabul en 1996. Ayudo luego a extender su control sobre un 95 por ciento de un país destruído por la guerra y reforzar sus capacidades militares. Se cree que el ISI ha llevado a cabo operativos adicionales en Afghanistan poco antes de los ataques del 11 de Septiembre pasado en los Estados Unidos.

Junto con el nombre de Osama Bin Laden, fuentes de inteligencia aseguran que otros terribles nombres surgieron de la colaboración durante los años 80 entre el ISI y la CIA en Afghanistan. Estos incluyen Mir Aimal Kansi, quien asesinó a dos oficiales de la CIA fuera de su oficina en Langley, Virginia, en 1993; Ramzi Yousef y sus cómplices, envueltos en el atentado del World Trade Center 5 años después; así como un gran grupo internacional de traficantes de narcóticos.

La producción y el cultivo de heroína y Opio en las tribus del norte de Pakistán, y vecinas de Afghanistán, fue también vital para la relación de cooperación entre el ISI y la CIA. Fue un triunfo no solo por convertir a los sovieticos en adictos, sino también por aumentar las ventas en Europa y los Estados Unidos gracias a una muy bien elaborada red de transportes , correos y pagos. Esto, en su turno, conpensó el costo de la “guerra no-santa” de 10 años en Afghanistan.

“Los dolares de la heroína contribuyeron ampliamente a reforzar la economía pakistaní, y su programa nuclear y permitió al ISI esponsorear sus acciones encubiertas en Afghanistan y la provincia en disputa al norte de la India, Cachemira,” informó un oficial de inteligencia indio. En los años 70, el ISI había establecido una división militar para procurar tecnología nuclear y misilística del extranjero, particularmente de China y Corea del Norte. Asimismo, entraron en el contrabando de componentes nucleares críticos junto con las instrucciones de como proceder aportadas desde Europa, actividades sabidas por los Estados Unidos pero que fueron
pasadas por alto pués el objetivo de este último, el “humillar” a los sovieticos, podría quedar incompleto.

Un Director General, siempre un oficial del ejército con el cargo de Teniente General, dirige el ISI, que es controlado por el ministro de defensa pakistaní y responde directamente al jefe de Estado del Ejército. Como actual jefe del ISI, el General Ahmed es asistido por tres altos generales, encabezando las divisiones politica, exterior, y administrativa de la agencia, que están dividivas más ampliamente en ocho secciones:

  1. Junta de inteligencia del norte: Responsable por los talibanes en Afghanistan y la insurgencia de Cachemira. Esta sección controla el ejército del Islam que comprende el grupo de Osama Bin Laden Al-Qaeda y los grupos militantes de Cachemira, como Harkat-ul-Mujahidden (prohibido por los Estados Unidos la semana pasada), Lashkar-e-Toiba, Al Badr y Jaissh-e-Mohammad. El Teniente General Mohammad Aziz, actualmente comandante de los cuerpos de Lahore y un ex-oficial del ISI, encabeza el Ejército del Islam, que controla también los cultivos de opio y las refinerías de heroína, junto con el contrabando, desde territorio afgano y pakistaní.
  2. Oficina de la Junta de inteligencia: responsable de informaciones públicas y recolección de datos locales y extranjeros.
  3. Oficina de contra-inteligencia: tareas de contra-inteligencia interna y externa.
  4. Oficina de rastreo de signales de inteligencia: a cargo de todas las comunicaciones
  5. Junta de inteligencia de informaciones variadas: responsable de acciones encubiertas en el extranjero, particularmente aquellas relacionadas a la obtención clandestina de tecnologías misilística y nuclear.
  6. Junta de inteligencia X: lleva a cabo la administración y contabilidad.
  7. Junta de inteligencia tecnológica: junta toda información técnica más allá de comunicaciones para investigación y desarrollo de equipamientos.
  8. Ala especial: mantiene en funcionamiento la Academia de Defensa de los Servicios de Inteligencia, y está ligada a las agencias de inteligencia exterior y de seguridad.

“La preocupación ahora para el General Musharraf es si el ISI va a permanecer fiel a él y proveerá a los Estados Unidos información creíble, o si continuará con su propósito de asegurar la continuación de los talibanes en Kabul,” dijo un oficial de la inteligencia pakistaní.
Los Estados unidos, agregó, se retirarán de la región cuando sus objetivos hayan sido alcanzados, pero Afghanistan, con su insesante y aparentemente irresoluble agitación, continuará siendo el vecino de Pakistán. [Source: Rahul Bedi en Nueva Delhi. Janes’s Defence, 01oct01 - Traducción al español desde el original en inglés realizado por el Equipo Nizkor 12oct01]


ii) LISTA DE CAMPAMENTOS MILITARES DE BIN LADEN SEGÚN NOTA RUSA ENVIADA A LA ONU EN MARZO DE 2001

ISLAMABAD, 26 de septiembre (Reuters) - Según informaciones provenientes de Rusia, el militante terrorista Osama Bin Laden, nacido en Arabia Saudí, contaba a principios de este año con al menos 55 bases o centros de actividad en Afganistán, y con más de 13.000 hombres, cuyas nacionalidades van desde árabes y paquistaníes, a chechenos y filipinos.

En una nota rusa dirigida a las Naciones Unidas, a la cual ha tenido acceso la agencia de noticias Reuters, se informa de que además de los hombres directamente bajo el mando de Bin Laden, aproximadamente 3.500 fundamentalistas paquistaníes se encontraban también en el país, así como soldados y diplomáticos paquistaníes que trabajaban como asesores de la línea más dura del movimiento talibán.

En la nota enviada al Consejo de Seguridad de la ONU, fechada el 9 de marzo de 2001, se dice que la mayoría de las instalaciones militares de Bin Laden se encontraban en las ciudades más importantes de Afganistán, o bien en sus alrededores, como Kabul, en el sur Kandahar, al este Jalalabad y Mazar-i-Sherif al norte.

La mayoría se encuentra en antiguas bases militares o grandes centros agrícolas estatales de Afganistán, o bien en cuevas situadas en regiones montañosas de terreno escarpado. Unos 150 hombres tenían como base de operaciones las instalaciones del Bagh-i-Bala, un restaurante que antaño fuera el sitio de moda para cenar en Kabul, situado en la cima de una montaña.

Lo que no queda claro es si estas instalaciones, que forman parte de la red terrorista Al Qeda ("la base"), estaban aún operativas en el momento de los atentados suicidas contra las Torres Gemelas y el Pentágono de Estados Unidos, o bien posteriormente.

Washington ha declarado a Osama Bin Laden como el principal sospechoso de dichos ataques y ha prometido capturarlo "vivo o muerto", además de castigar a los talibán por darle asilo. Los talibán han respondido que ya han tomado medidas urgentes para defenderse en caso de un ataque aéreo por parte de Estados Unidos.

En una “nota provisional” de la delegación de Moscú ante la ONU se decía que la nota rusa se había escrito en respuesta a una petición del año 1999 del Consejo de Seguridad de la ONU sobre información relacionada con "bases y campamentos de entrenamiento de terroristas internacionales en Afganistán", así como con asesores extranjeros de los talibán.

Una vez desvelados los nombres que contiene la lista de la nota, en la que figuran 31 paquistaníes, entre generales y diplomáticos, que al parecer trabajaban como asesores en Afganistán, no fue posible obtener una declaración inmediata al respecto de ningún
portavoz militar paquistaní.

A Pakistán, el único país del mundo que aún reconoce el gobierno talibán, se le lleva acusando desde hace tiempo de dar apoyo logístico y armas al movimiento talibán, aunque oficialmente niegue cualquier tipo de relación.

LA BASE DE OPERACIONES ESTÁ FUERA DE KABUL En la nota, la cual obtuvo el Ministro de Defensa de Filipinas después de que ésta fuera enviada por cable desde la misión de Manila ante la ONU en Nueva York, se dice que el centro de operaciones de las fuerzas de Bin Laden se encuentra en la base militar de la Séptima División afgana, en Rishkhor, al sur de Kabul.

Según la nota, este centro está al mando de Qari Saifullah Ahtar, “segundo” de Bin Laden, y cuenta con 7.000 combatientes, incluidos 150 fundamentalistas árabes y algunos paquistaníes, además de un regimiento militar paquistaní. Se añade además en la nota que en un campamento cercano a dicho centro se encuentran instructores provenientes de Libia, Túnez y Egipto.

Más al sur, en Charasiab, en una antigua base de los muyaidines antisoviéticos, se encuentran tropas que incluyen a 50 filipinos y 40 uigures de la región mayoritariamente musulmana de Xinjiang, situada al oeste de China.

La nota de Rusia, país que actualmente lucha contra los separatistas musulmanes de Chechenia, informa de que al menos 2.560 chechenos se encontraban sirviendo o bajo entrenamiento en la organización de Bin Laden.

Asimismo, se informa de la existencia de un número desconocido de checos y búlgaros en activo en una base muy bien protegida de la provincia de Logar, al sur de Kabul.

En el informe se menciona seis veces a Kandahar, ciudad meridional que es el centro espiritual del puritanismo talibán, aunque en ella no existen instalaciones militares de importancia.

En la región oriental cercana a Jalalabad, existen unidades de Bin Laden con base en la ciudad, en dos grandes centros agrícolas estatales construidos por los soviéticos y en antiguos puestos militares cercanos a la frontera con Pakistán.

PARTICIPACIÓN DE PAKISTÁN
De los 19 campamentos militares bajo el mando de fundamentalistas paquistaníes, la nota informa de tres grupos militares en activo cerca de Kabul. No se aclara la identidad de quiénes estaban al mando de los demás campamentos militares.

Existen varios grupos paquistaníes que han movilizado a estudiantes de las escuelas religiosas para unirse a la lucha en Afganistán.

En la nota también se dice que seis paquistaníes tenían altos rangos en la milicia de los talibán y se ha identificado a un antiguo palacio real situado al sudeste de Kabul como "cuartel general del comandante en jefe de las fuerzas paquistaníes en Afganistán."

Un avión de reconocimiento paquistaní modelo AWACS, del tipo de los que originalmente proporcionó EE. UU. para controlar las actividades de rusos y afganos durante la guerra de los 80, se encontraba en Mazar-i-Sharif, al norte de Afganistán, para realizar vuelos de reconocimiento de las fronteras con Turkmenistán y Uzbekistán. En la nota no se revela la fuente de toda esta información.

Moscú mantuvo lazos estrechos con el servicio de inteligencia Khad de Afganistán durante la guerra contra Rusia de 1979 a 1989, y durante este período entrenó a miles de izquierdistas afganos en las universidades de la antigua Unión Soviética.
[Source: Reuters, 26sep01 Por Tom Heneghan con información adicional por Rubén Alabastro, desde Manila. Traducción al español desde el original en inglés realizada por el Equipo Nizkor 12oct01]